Con la llegada del verano muchas familias optan por llevar a sus hijos a alguno de los campamentos de la zona que este año serán un poco distintos para cumplir con todas las medidas de seguridad contra la Covid-19.
La comarca de Pinares cuenta con diferentes opciones de campamentos de verano para los más pequeños, uno de ellos es Rock Camp, ubicado en Sotolengo; allí los jóvenes podrán mejorar su destreza como músicos y aprender a componer sus propias canciones perdiendo la vergüenza de subirse al escenario.
Desde Rock Camp entienden que “el campamento no es solo la parte lúdica si no que también enseña valores y se obtienen experiencias de vital importancia para el desarrollo y la formación de los niños y jóvenes”. Ofrecen un entorno seguro a través de controles de salud diarios tanto de los participantes como del equipo, limpieza y desinfección periódica de las instalaciones.
En Rock Camp este año se han visto en la obligación de tener que cancelar Rock Camp Junior, que estaba destinado a los niños más pequeños de entre 9 y 11 años como medida preventiva para así poder cumplir con los requisitos para poder abrir el de mayores.
“Muchos inscritos ya los teníamos de antes y al ver que el campamento sale adelante se han mantenido, también hay gente que se está animando a inscribirse. Vamos a dar mucha importancia al uso de mascarilla entre los jóvenes para que tomen conciencia de la importancia que tiene y contarles las medidas preventivas y el por qué hay que usarla” afirman desde Rock Camp.
Este año se han tenido que ver en la obligación de reducir su aforo para seguir los protocolos que marca la Junta y el Gobierno. También se han reducido los grupos para la realización de actividades, así como controles diarios de síntomas y temperaturas. Carteles informativos y gel desinfectante serán lo habitual o distintos turnos para las comidas son algunas de las nuevas medidas de seguridad.